30/08/2017
Por: APIALIA
Ante la urgencia de vender un inmueble, propietarios y empresas de financiación pueden exagerar y hasta mentir sobre las características de la casa. Desperfectos como filtraciones, tuberías corroídas por el óxido, así como también un metraje disfrazado pueden representar pérdidas si no estamos al tanto. Por ello, es necesario hacer todas las preguntas adecuadas (y hasta incómodas) a los propietarios, así como a la banca que nos otorgará el crédito hipotecario. A continuación, te diremos cinco mandamientos que deberás tomar en cuenta a la hora de visitar tus viviendas potenciales antes de decidirte por una.
La prisa no tiene lugar
A la hora de visitar inmuebles para comprar, es inaceptable que te abandones a las prisas. Esta no será la mejor consejera para tomar la mejor decisión. No solo nos referimos a que abras espacio en tu agenda para poder visitar varias opciones, sino que te tomes el tiempo para revisar la vivienda desde el interior hasta el exterior. Una hora no es una exageración.
Ve acompañado
Aunque no estés casado, ir con alguien de tu entera confianza reforzará cualquier decisión. Si escoges a un amigo o familiar que tenga una visión estética o de negocios aguda, con más razón deberías ir junto a él. En caso de que estés en pareja, ambos deberían estar de acuerdo con la decisión final.
Escoge el día y hora apropiados
A veces las visitas son limitadas a fines de semana o alguna hora específica del día, pero si tienes oportunidad, deberías solicitar una hora del día en que la vida circundante esté en plena circulación. Así podrás examinar factores de ruido, iluminación, tráfico y área comercial del barrio.
No temas hacer preguntas “incómodas”
Las preguntas incómodas muchas veces terminan siendo necesarias. No temas interrogar al propietario sobre su razón para la venta, quiénes han vivido en la casa, la seguridad de la zona y todas las dudas que ronden por tu cabeza.
Asegúrate de que todo está en perfecto estado
Es importante que antes de retirarte del inmueble, te asegures de que todo está en perfecto estado. Desde las paredes, hasta el estado del techo. No olvides las tuberías, el jardín, las griferías y… Todo.